Una vez fuimos guerreros

La película que en español muchos hemos conocido como "Somos guerreros", es una poderosa herramienta metodológica para crear conciencia en los trabajos de masculinidades y prevención de la violencia de género. Ya desde 1994, fecha de su lanzamiento, su director, Lee Tamahori (Nueva Zelanda), recibió muchas críticas y prohiciones por lo "fuerte", "cargada" de la película, cuestionando además si lo que se cuenta es en verdad la realidad del pueblo maorí de Nueva Zelanda. Quizá haya que atender las críticas y contextualizarlas en el lenguaje fílmico, pero la producción sigue activando la conciencia de muchas personas en torno a la marginalidad a la que son condenados los pueblos "indígenas" y a las dinámicas sociales que genera el sistema y que al ocurrir entre personas empobrecidas o excluídas son publicitadas con mayor morbo.

A muchos hombres que participamos de los procesos de Masculinidades, la película nos ofrece una brillante oportunidad para entender de cerca el modelo hegemónico de masculinidad, sus espacios de socialización y legitimación y algunas de sus peores consecuencias sobre las mujeres, otros hombres y uno mismo.

Algunas pistas para la retroalimentación grupal utilizando esta película como herramienta pedagógica para motivar a los cambios de los hombres, son:

* identificación y ubicación de los personajes, tanto masculinos como femeninos, según el modelo de análisis del programa de masculinidades:

Jake, el músculo (hombre hegemónico).
Tío Bully
Nig
Boogie
Huata
Dooley (amigo)
Bennet (amigo)
Taka (el jefe de la pandilla)

Beth
Grace (la hija mayor)
Polly (la hija menor)
Mavis (la amiga)

Se propone ir ubicándoles, no sólo en trama, sino en el esquema de análisis político de las masculinidades (sobrevivientes, transeúntes, transgresores, "vigilantes")

* Identificar emociones en momentos de silencio después de la película.
No analizar, explicar o justificar, simplemente, al terminar, ofrecer unos instantes para repasar lo que está sintiendo dentro, identificar esas emociones y sentirlas a flor de piel.

* utilizar las estatuas de emociones (cfr. "aportes metodológicos en Masculinidades". Escuela Equinoccio, programa de Masculinidades, Centro Bartolomé de las Casas, 2007), al menos en tres versiones diferentes.

* recordar momentos "fuertes" que nos hayan impactado por su grafismo de cara a la construcción de la masculinidad hegemónica (posteriormente a la identificación y salida de emociones).

Finalmente, recomendamos encarecidamente que la película no sea utilizada en ambiente masivos o en la presencia de niños y niñas, especialmente si son la familia de los hombres con quienes se trabaja en procesos. En este mismo sentido, hay que verla con calma, ojalá en un lugar protegido, donde se pueda expresar libre y confiadamente las emociones.

A las compañeras que trabajan con hombres, es importante recordar que usamos esta película como herramienta pedagógica para motivar al cambio, no como denuncia o ataque a los varones participantes del proceso.

Enlaces útiles:
Trailer de la película: http://www.youtube.com/watch?v=f4F04i1wTlE
La protagonista (Beth) Rena Owen: http://www.youtube.com/watch?v=JpI6XtIeqYM
Ficha Técnica: http://www.imdb.com/title/tt0110729/

... Y para quienes terminamos odiando a Jake, quizá sea bueno recordar que es un actor buenísimo, artista y activista social, actuó en "la Guerra de las Galaxias, el ataque de los clones". Lo pueden ver en entrevista en: http://www.youtube.com/watch?v=h97NC108OPc
Escenas cortadas de Jake: http://www.youtube.com/watch?v=3ffhVj_33G0